Al grito de de “No es capricho, es necesidad”, “No al sufrimiento, sí al desdoblamiento” o “Queremos conducir, no sobrevivir” unas 4.000 personas han pedido lo que consideran una necesidad, como es el desdoblamiento de la carretera N-430 en la Autovía A-43. Ha sido en una concentración multitudinaria celebrada en el día de ayer en Navalvillar de Pela hasta donde se han desplazado decenas de autobuses de los pueblos afectados, muchos llegados también desde la provincia de Ciudad Real. Un acto convocado por la Plataforma N-430 para que no sigan repitiendo cifras como las 50 personas fallecidas en accidentes en esta carretera en los últimos diez años, como ha recordado el presidente de la plataforma y alcalde de Puebla de Don Rodrigo, Venancio Rincón.

En la cabecera de la manifestación, miembros de la plataforma convocante portaban una de las muchas pancartas acompañados por más de 40 alcaldes extremeños y castellano manchegos y miles de vecinos. La marcha también ha sido secundada por numerosas empresas, asociaciones agrarias y la patronal CREEX, entre otras entidades.

Una vez llegados al destino, la N-430 ha sido cortada al tráfico durante alrededor de una hora, llegando a formarse retenciones kilométricas, con especial presencia de camiones. En el escenario, el alcalde de Navalvillar de Pela, Francisco Javier Fernández, ha recordado que, en una comarca eminentemente hortofrutícola, “el día a día en la carretera es insufrible”. Y es que el trazado está lleno de intersecciones de acceso a los caminos y fincas, lo que conlleva un alto volumen de maquinaria agrícola circulando “que se mezcla con el resto de vehículos y generan mucha inseguridad”, ha dicho.

Pero no solo la siniestralidad y los accidentes son motivos de esta protesta. El desarrollo de la comarca depende en buena parte de esa futura autovía. Así lo manifestaba el portavoz de la Plataforma N-430 y alcalde de Herrera del Duque, Saturnino Alcázar, quien ve “una oportunidad de desarrollo y empleo” en la comarca de las Vegas Altas.

Tras ellos, dos jóvenes estudiantes que utilizan la carretera a diario para ir al instituto peleño han leído un manifiesto para transmitir su experiencia, ante miles de manifestantes.