La Guardia Civil ha instruido diligencias a un vecino de Castuera, como presunto autor de un delito contra la flora y fauna.
El pasado 30 de julio, agentes de la Patrulla del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil de Castuera, dentro de los servicio para prevenir acciones de furtivismo, localizaron en un coto social del término municipal de Castuera, una jaula trampa que contenía en su interior comida y agua a modo de cebo, supuestamente con el objetivo de atraer y capturar animales.
Con las gestiones practicadas durante el transcurso de la investigación en el paraje, los agentes pudieron identificar al responsable de su instalación. Era el titular de la finca vecino de Castuera, quien supuestamente pretendía apresar las alimañas que causaban daños en su propiedad.
El hecho de cazar o capturar especies silvestres sin estar legalmente autorizado con este tipo de artes prohibidas (jaulas trampas), consideradas de carácter no selectivo por afectar indiscriminadamente a distintas especies, puede ser constitutivo de un delito contra la fauna.
Ante las pruebas incriminatorias, el pasado jueves al responsabe de la accion ilicita, se le instruyó diligencias que han sido entregadas en el Juzgado de Instrucción de Castuera.