Las industrias de tomate asociadas a Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura han cerrado la contratación de esta campaña a 115 euros por tonelada, un precio superior al del resto de industrias del sector en la región.
Desde la organización destacan que este acuerdo reafirma el papel clave del cooperativismo agroalimentario en el desarrollo económico y rural de Extremadura. Además, subrayan que ningún agricultor socio de estas cooperativas recibe precios por debajo de los costes de producción.
El pasado 14 de febrero finalizó el plazo de entrega de contratos a la Administración, y las industrias cooperativas han cumplido en tiempo y forma, asegurando que sus productores no sufran penalizaciones en las ayudas que reciben.
Según Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura, el precio pactado garantiza el cumplimiento de la Ley de la Cadena Alimentaria, ya que el coste medio de producción de una tonelada de tomate en la pasada campaña fue de 114,7 euros, según un informe elaborado por la propia organización.
Ventaja del cooperativismo: Los productores no solo reciben un precio justo por su producto, sino que también participan de los beneficios de la transformación industrial que realizan sus cooperativas, asegurando que el valor añadido se quede en la región.
Desde el sector aplauden las ventajas que obtienen los agricultores que forman parte de las industrias cooperativas, como por ejemplo pueden ser Tomates del Guadiana o Pronat. Sin embargo, el presidente de Agryga, Herminio Íñiguez, lamenta que los costes se hayan calculado teniendo en cuenta únicamente la media de producción del año pasado.
“Es cierto que en este punto en el que estamos de la negociación, las cooperativas siempre han sido la salvación de las explotaciones. Lo que no estoy de acuerdo es que se diga que se cumple con la ley de la cadena alimentaria. Los costes del cultivo no se calculan respecto a un año anterior, sino en la media de los últimos cinco años, sobre todo en la producción del cultivo. No es justo decir que el año pasado los costes fueron de 114 euros, porque no es correcto. Nunca se han obtenido 98 toneladas de media en Extremadura, el año pasado fue la primera vez, por lo que no es justo que se diga que los costes se diga que se han calculado con estas medias. Los costes son de 126 euros la tonelada. El papel de las cooperativas es importante, pero me parece penoso que digan que han puesto un precio por encima de los costes de producción y digan que el precio es de 115, un euro de beneficio”.
Por eso mismo no ve lógico que el precio se haya fijado en los 115 euros. Solo un euro más que lo que estipula el estudio de Cooperativas agroalimentarias en el coste medio de la producción de este cultivo, que además requiere de una importante inversión: unos 11.500 euros por hectárea.
“El agricultor mueve 11.500 euros por hectárea para ganar un euro por tonelada. Si tenemos unas medias como el año pasado ganaríamos 98 euros por hectárea. Es necesario cambiar el discurso, no está siendo serio y hay que unificar el sector productor y los agricultores debemos coger las riendas y ser más protagonistas en nuestra negociación porque hay muchos intereses y factores en medio que al final el que se tome una decisión u otra afecta a los agricultores y sus familias”.
Desde el sector advierten que la campaña de producción ya está condicionada por la importación de tomate de países extracomunitarios, donde los costes de producción son menores. A esto se suman los altos niveles de stock y la creciente demanda de cultivo de tomate en la región, ya que muchos productores lo ven como la única alternativa rentable ante la caída de precios en otros cultivos.
Extremadura sigue liderando el sector del tomate para industria a nivel nacional, y las cooperativas juegan un papel clave en su competitividad.