Alumnos dombenitenses participan en el programa “Sembrando Vida”, mediante el que plantarán 2.000 ejemplares de encinas y alcornoques.

La Finca Municipal Doña Blanca ha acogido en los últimos días el programa con el que la Concejalía de Medio Ambiente trabaja para reforestar las zonas verdes de la ciudad. En esta edición han participado alumnos de Educación Primaria de cada centro educativo de Don Benito, así como un grupo de alumnos del Colegio de Educación Especial “Ntra. Sra. de las Cruces” de Plena Inclusión.

Se trata de plantas jóvenes, autóctonas, que al estar aún en fase de desarrollo pueden mantenerse en las instalaciones de AGRIMUSA para dar continuidad al proyecto “Sembrando Vida” durante al menos dos o tres años más.

Con la colaboración de la Asociación de Ocio y Tiempo Libre Minerva, han compartido unas jornadas con actividades educativas y lúdicas en las que han conocido el entorno natural y las necesidades de estas especies autóctonas, todo orientado a que los niños y niñas aprendan, disfruten y conecten con la naturaleza mientras participan.

Concienciación

Dicha actividad forma parte también del proyecto Plantabosques de la Junta de Extremadura, con el que se acerca a los alumnos la importancia de los árboles y zonas verdes, además del peligro de los incendios y de la importancia de reforestar con especies autóctonas.

Como reconocimiento a su implicación, cada participante recibe un diploma acreditativo que simboliza su contribución a la mejora del entorno natural. Una forma de dejar una huella positiva en esta finca y, literalmente, sembrar vida.

La alcaldesa, María Fernanda Sánchez, ha estado presente junto con la concejala de Medio Ambiente, Elisabeth Medina, y el gerente de ADENEX, Francisco Parra, en una de estas jornadas de reforestación, en la que ha animado a los más pequeños a cuidar de este pequeño espacio que ahora ya también es suyo, destacando la importancia de crear consciencia desde edades tempranas en el cuidado del medio ambiente.

Una iniciativa impulsada por ADENEX y AGRIMUSA gracias a la donación de cerca de 2.000 ejemplares de encinas y alcornoques. El banco de plantas permitirá seguir implicando a nuevos grupos escolares y ampliar el alcance de esta acción de restauración ecológica en zonas con déficit de cobertura forestal.