La Policía Nacional ha desmantelado varios puntos de venta de droga en Extremadura en la conocida como ‘Operación Tiburón II’, que se ha saldado con siete personas detenidas y que formaban un grupo criminal dedicado a la venta de cocaína, según ha indicado la Policía en una nota de prensa.
Agentes de la Policía Nacional, en colaboración con el Servicio de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria de Extremadura, procedieron el pasado mes de septiembre a la detención de siete personas por su presunta autoría de un delito contra la salud pública, pertenencia a grupo criminal, blanqueo de capitales e infracciones de contrabando.
La investigación comenzó a mediados del 2023 tras recibir informaciones de la existencia de un grupo de personas que pudiera estar dedicado a la venta de drogas en Extremadura.
Las gestiones llevadas a cabo permitieron identificar a los posibles integrantes del grupo, comprobando cómo distriburían la cocaína desde Villanueva de la Serena, donde presuntamente residía el miembro principal de esta red, hasta numerosas localidades de Cáceres y Badajoz.
Los principales miembros del grupo tomaban grandes medidas de seguridad, lo que dificultaba las vigilancias y seguimientos llevados a cabo, según han indicado. Entre las medidas destacadas mencionan el continuo cambio de vehículo, desplazamientos por caminos o carreteras con poco tráfico y la entrega sin contacto entre distribuidor y receptor (incluso intervinieron una de esas entregas en el tronco de una encina).
La Policía registró ocho viviendas en distintas localidades, entre las que se encuentra Villanueva de la Sernea, donde el principal investigado ocultaba la sustancia estupefacientes, útiles para el pesaje, envasado y distribución de grandes cantidades de cocaína, además de una fábrica ilegal de tabaco, tal y como ha mencionado la Policía Nacional.
De forma paralela, Aduanas realizó una investigación económico-patrimonial del detenido, del que descubrieron presuntas ganancias ilícitas reinvertidas en la adquisición de importante patrimonio inmobiliario y vehículos de alta gama que pudieran constituir un delito de blanqueo de capitales, todo ello puesto en conocimiento de la autoridad judicial.
En total intervinieron 1.600 gramos de cocaína, 174.000 en efectivo, básculas de precisión, sustancia de corte, una máquina envasadora, una máquia picadora de tabaco de procedencia ilícita, picadura de tabaco y cinco vehículos.
Los detenidos son siete hombres de entre 32 y 56 años de edad, con antecedentes y que fueron puestos a disposición judicial, decretando el ingreso en prisión de uno de ellos.